Capítulo 72- The Drama They
Crave
El hombre suspiró tras escuchar toda la historia de los
labios del albino. El chico sabía que podía confiar
en su profesionalismo. Es más, estaba seguro de que no se
le ocurriría traicionarlo después de lo que le había
contado.
Movió los dedos en su cabello blanco esperando a que el
hombre dijera algo -¿Qué vamos a hacer? ¿Cómo
está la situación?
-Veamos… tendrá que declararse culpable.
- No! – Ren se puso de pie, perdiendo los estribos y en realidad
robándole a Dragon las palabras de la boca. – No....
Slave no puede ir a prisión. De todos modos, es mi culpa
¿no? Tal vez pueda...
- ¿Ir a prisión también? ¿Y eso haría
feliz a Slave? – Dragon lo haló, sin mucha delicadeza,
sentándolo de nuevo, aunque lo hacía con buenas intenciones.
También estaba asustado. – Axl hará algo, eso
no va a pasar. – miró al albino como si esperase su
próximo truco de magia.
Axl se echó atrás en el asiento -¿Por qué
culpable? ¿No hay otra salida?
-El chico no me dijo nada… sólo que hablase con el
señor Takagi y que le pidiese perdón…- carraspeó
un poco –Y que lo ama… pero sobre todo me dijo que no
quería que los condenasen a ustedes y al señor Takagi
menos que a nadie… Yo he de respetar su deseo como cliente,
pero además creo que es mejor así. Si me permiten,
les explicaré lo que me parece deberían hacer…
lo mejor para todos…
-Adelante…- el albino lo miró interesado y claramente
preocupado a la vez.
-Es imposible con las pruebas de las que dispone ahora mismo la
policía, que el chico se libre de ser condenado por el asesinato
de la señorita Akane Abe…
Ren cerró los ojos, algunas lágrimas escapando bajo
sus párpados, a pesar de que se trataba de controlar. Sólo
podía pensar en cómo lo debía estar pasando
Slave allá, solo, pensando que se enfadaría, como
si eso fuera posible.
Dragon le sujetó la mano, apretándosela, y sin querer
decir nada enfrente del abogado pero planteándose si no habría
alguna forma de destruir esa evidencia. Si era todo lo que tenían
en su contra...
-Lo mejor será que confiese querer darle un escarmiento
por haber hecho aquello a su pareja… que el señor Takagi
se opuso… pero no le escuchó… que lo hizo a la
espaldas de ustedes… Sólo quería asustarla,
pero estaba drogado y las cosas se salieron de las manos. Ella se
cayó huyendo de él… declararemos homicidio involuntario…
Si confiesa, será más fácil y más leve
la condena, tal vez incluso podamos prescindir del juicio…
-¿Respecto a los otros crímenes?
-No tienen pruebas y sin pruebas, ninguno de esos crímenes
están relacionadas con… el chico.
- Pero fue mi culpa.... – suspiró Ren, aunque aliviado
de saber que al menos no tenían nada en relación con
lo demás. – No debimos hacer esto...
Dragon se puso de pie acercándose a Axl, sin que le importase
mucho cómo lo viera el abogado y se arrodilló apoyando
el rostro contra el escritorio en actitud infantil. - ¿Seguro
que no podemos hacer anda más?
Axl lo miró y le pasó la mano por el pelo echándose
adelante y cogiéndolo sobre sus piernas –No lo creo…
¿Cuánto cree que será la condena si todo sale
bien?
-No lo sé… siete años tal vez…
-¿Siete años?!- Axl golpeó la mesa con fuerza
–Siete años no… Haz algo… pero ya…
y si no sabes, invéntatelo… dos años como mucho…
El hombre lo miró pensando que era igual que su padre…
creyendo que él podía rebajar condenas con desearlo.
- Y si no puede, yo me entregaré. – sentenció
el rubio, abriendo los ojos de nuevo, y observándolos.
- Ren, no creo.... – empezó a protestar Dragon, pero
el chico lo interrumpió de nuevo, tajante.
- No voy a cambiar de idea. No puedo dejarlo solo por siete años,
no soy capaz de sobrevivir sin él ni una noche....
-No!… consigue que reduzcan su pena… es una victima
de la sociedad! Invéntate lo que te dé la gana…-
el albino se levantó, dejando a Dragon en el asiento y caminando
por el cuarto encendiendo un cigarro y pasándose la mano
por el flequillo –Esto… sus padres lo echaron de casa
por ser homosexual… tuvo que vivir en un almacén abandonado…
compartiendo lugar con pordioseros… incluso muertos…
Al fin encuentra a alguien que lo ama… lo cuida… y esta
persona le cuenta lo mucho que ha sufrido por culpa de la justicia…
del estado de las cárceles… lo mucho que lo violaron!
Haz… al…go!- golpeó la mesa delante del abogado
–Conviértelo en una víctima! Se drogaba porque
no podía ni comer… era su único escape…
esa noche también estaba drogado…- entrecerró
los ojos apretando el puño en la madera
-Está bien… iremos a juicio… haremos eso…-
el hombre lo miró a los ojos un poco amilanado en realidad
–también…
- ¿También? – preguntó Ren , por si
tenía algo que añadir, mientras por su parte Dragon
se limitaba a jugar con un adorno sobre el escritorio, pensando
que sería genial si solamente pudieran matar a todos lo que
lo tenían encerrado.
-Probablemente el juez sea cierta persona… depende de lo
que les interese la reducción de la pena podríamos…
comprarla… - sugirió pensando que seguramente a aquellos
chicos no les importaría nada hacerlo de aquel modo –Entonces…
aún así… podríamos reducir la pena una
vez en la cárcel y cumplidas las tres cuartas partes de esta
por buena conducta… aunque saldría bajo vigilancia…
-Haremos eso… le pagaremos… cómpralo…-
el albino se sentó en el borde de la mesa un poco más
relajado, aunque seguía tenso y se cruzó de brazos
con el cigarro en los labios.
- Eso! – Dragon celebró como si ya hubiesen ganado,
aunque hundiéndose de nuevo, al pensar que de todas maneras
pasaría un tiempo en la cárcel. Aún recordaba
sus conversaciones sobre aquella posibilidad.
- Es posible que... ¿me llamen a testificar? – preguntó
el rubio, preocupado por aquello. No sabía si tenía
la fuerza para subir al estrado y decir que había sido Slave
solo. Claro, que si eso lo beneficiaba, lo haría, como fuese.
-No es que sea posible, será necesario… y espero que
pueda aportar un tono lo más dramático posible a su
situación… posterior, en la cárcel… necesitamos,
su novio necesita que la sociedad comprenda sus actos… sus
deseos de venganza…
Axl miró a Ren y se sentó a su lado rodeándole
un poco la espalda –Él estará contento de hacer
esto por ti…
- Lo sé... – suspiró el chico, sin muchos ánimos,
sonriendo levemente a pesar de todo. – No creo que... el drama
sea un problema.
|