Capítulo 63- Bridge Over Troubled
Drivers
Dragon se enderezó, desde su posición sobre las piernas
de Axl, en donde había estado haciéndole “cariñitos”,
y se recostó contra el asiento del coche, finalmente halando
la palanca para quedar completamente acostado a su lado. - ¿A
dónde me llevas? ¿A casa? ¿O vamos de paseo?
-No… a casa no…- se rió pasándole la
mano por la cara y mirándolo a los ojos, observando el gesto
infantil que tenía pese a todo. Se bajó del coche
y le abrió la puerta, llevándolo con él a cruzar
la carretera, subiendo a todo correr los peldaños de la escalera
hasta la parte más alta del puente. Lo apretó contra
la barandilla poniéndose atrás de él y le bajó
la cara a medida que se inclinaba él mismo un poco, mirando
los coches pasar rápidamente por debajo de este –“Desnúdate…”-
le susurró al oído arriesgándose, su mente
diciéndole que no hiciera eso y lo que sentía por
Dragon haciéndole dejar de razonar y de pensar en la gente
que caminaba por la calle… los coches…
Dragon jadeó, excitado, empezando por desabrocharse los
pantalones, y luego sacándose la camiseta, sintiendo el aire
frío de la noche contra su piel, pasando a bajarse los pantalones,
observando sólo los ojos de Axl.
-Todo… quítatelo todo…- le acarició los
pezones con los dedos, sintiendo que estaban duros por el frío
y lo miró, lamiéndoselos y mordiéndoselos.
Lo abrazó, metiendo las manos bajo su ropa interior, besándoselos
aún y observando a una mujer que caminaba con su hija por
la calle. Sonrió, mordiéndoselos un poco de nuevo
y estirando su piel con suavidad.
El chico gimió sin poner cuidado, completamente excitado
por todo aquello y por cómo lo miraba, y se bajó la
ropa interior como pudo, pateando un poco para sacársela
del pie. –Eres... fantástico, Axl...
-Dios mío….- escuchó a la mujer que no los
había notado, dada la altura del puente, hasta llegar arriba
y verlos, escuchándola bajar acto seguido corriendo de vuelta
por donde había llegado. El albino se rió entre dientes,
tapándose un poco los labios con la mano.
-¿Te gusta hacerlo aquí?- lo sujetó, sentándolo
en la barandilla metálica del puente y le apoyó las
manos allí –Sujétate… - le separó
las piernas, sintiendo algo de vértigo él mismo, lamiéndose
los labios algo rojo, observando su sexo y su ano –Tócate…métete
los dedos dentro… - le pidió, aunque tuviese que sujetarse
entonces con una sola mano, conociendo que ambos disfrutaban de
aquel peligro.
Dragon se rió, relamiéndose luego y mirándolo
a los ojos, inclinándose un poco hacia atrás por jugar.
– Que si me gusta.... me encanta... – se inclinó
hacia delante de nuevo, aún sonriendo, y apretando la barandilla
con una mano, soltando la otra, para empezar a acariciarse, gimiendo
y manteniendo el balance con algo de esfuerzo, lamiendo luego sus
dedos, para finalmente penetrarse con ellos, abriendo más
las piernas, y jugando en su interior, gimiendo con más fuerza,
moviéndose un poco sin poder evitarlo, a pesar de que sentía
el vacío a su espalda.
Axl sonrió, observándolo excitado y se acercó
un poco más, sujetando suavemente la mano con la que se tocaba
para sentir el movimiento, lamiendo de nuevo sus pezones y luego
observando cómo endurecían. Le sujetó una pierna
con fuerza y lo echó hacia atrás, empujándole
el pecho mientras se abría el pantalón –Suelta
las manos… -le sujetó la otra pierna esperando y lamiendo
su abdomen.
El chico jadeó, sonriendo un poco, excitado por supuesto,
con el riesgo, y se sacó los dedos de dentro, soltando la
mano que aún lo sujetaba a la barandilla y sintiendo cómo
el peso natural de su cuerpo, lo halaba hacia atrás.
-Te ves genial…- se rió, penetrándolo sin esperarse
más y apretando la pelvis contra sus nalgas, entrando en
él totalmente, dejando escapar un gemido fuerte entre los
labios e inclinándose hacia atrás para moverlo contra
él observando aún así cómo se balanceaba
y sonriendo al ver su sexo golpeando contra su abdomen una y otra
vez.
- Tú.... tú.... – jadeó el chico, riéndose
luego y soltando un gemido agudo a todo volumen, estremeciéndose
mientras se balanceaba con cada embestida de Axl, su sexo pulsando,
sentía la sangre arder en sus venas, se sentía increíble.
– Axl.... te amo! – le gritó, aún riendo
un poco, y volviendo a gemir de nuevo.
Axl se rió, subiéndolo y lo abrazó aún
con su sexo dentro, besándolo con fuerza y subiéndole
una pierna para penetrarlo mejor –Eh… ponte con la barandilla
entre las piernas… te agarras con las manos… yo me subiré
detrás… ¿quieres? Sino no puedo tocarte la polla…-
se rió tocándosela y moviendo la mano con fuerza en
ella mientras le lamía la mandíbula.
- Y eso no puede ser... – se rió, colocándose
como le pedía, a pesar de estar gimiendo de nuevo, y de sentir
el frío del metal contra su piel. No le importaba, jamás
había estado tan excitado. Cada vez se ponía mejor.
-No, no puede ser… - Axl le pasó la mano por la espalda
y subió una pierna por la barandilla, apoyando el pie en
el trocito de piedra que había hacia fuera, observando los
coches y preguntándose si los veían desde ahí.
Le empujó la lengua dentro del ano y subió, metiéndosela
de nuevo de golpe, gimiendo una vez más y sintiendo el viento
moverle el pelo –No me gustar ver algo que quiero y no poder
cogerlo…- se agarró a él en vez de a la barandilla
y bajó la mano, apartándole la pierna hacia atrás
y sujetando su sexo –Así me encanta…- se rió
mientras lo acariciaba con fuerza, penetrándolo sin cesar.
- Ah... mhm..... – el chico jadeó de nuevo sonriendo,
estremeciéndose de nuevo y mirando hacia abajo, los autos
pasando, sintiendo como si estuviese volando. – A...Axl...
– gimió, su sexo pulsando en la mano del albino, con
fuerza.
-Espera… un poco más…apriétame más…
ah…- le pasó la lengua por la espalda moviendo su sexo
con más fuerza, levantándole la otra pierna de la
piedra con la mano libre –Ya… córrete…
vamos…- le mordió un poco la piel de la espalda acariciando
su sexo desesperadamente y sintiendo que se correría como
fuera, por más que tratase de aguantarse.
-Axl... – Dragon protestó, aunque en broma, estremeciéndose
de nuevo y más por la urgencia de su voz, corriéndose
finalmente, el semen resbalando por la barandilla, parte de él
cayendo hacia abajo, mientras el chico gemía descontroladamente,
moviéndose para apretar más a Axl.
-Ah… me gusta… mientras te corres tú…-
apretó las mandíbulas, moviéndose dentro de
él y acariciando su sexo aún mientras se corría,
riéndose entre jadeos al notar cómo resbalaba fuera
del chico cayendo también. Se empujó con fuerza una
vez más dentro de él, sin poder apartarse por un momento
–Te quiero… - se rió besándole la espalda
y acariciándose con su sudor.
- Sí..... yo también... – sonrió el
chico, jadeando más calmado, y sujetándose a la barandilla,
aún mirando hacia abajo. Un auto pasó sonando el claxon,
y Dragon lo saludó, riendo, sin saber si era por ellos o
no, pero no le interesaba. Se sentía en la cima del mundo.
El albino se sentó así como estaba en la barandilla
y tiró de él hacia atrás, abrazándolo
desde su espalda y sujetándose con las piernas para no caerse.
Le lamió la cara para que se girase a besarlo y empujó
la lengua entre sus labios suavemente, cerrando los ojos –Hacemos
todo lo que nos da la gana…- susurró en su oído
al romperse el beso, aún abrazándolo –No pueden
hacer nada para detenernos...
- No, no pueden. Somos los mejores, ¿no es así? –
susurró, sonriendo, sintiendo el aire en el rostro como si
fuese una caricia, y tocando con una mano las de Axl. – Gracias
a ti...
-¿Gracias a mí?... – se rió pensando
que no sabía eso, tal vez gracias a Ryo –Sí,
gracias a mí…- se otorgó, riéndose un
poco por no quitarse mérito frente al moreno –Mientras
todos hagamos lo que tenemos que hacer, todo saldrá bien…
- Siempre y cuando sea divertido... – le recordó Dragon,
aunque sabía que pensaba igual que él. – Sólo
estamos comenzando....
-Sí… sino… no tiene sentido…eh…Leí
que el tipo ese vive en una casa en el campo… tiene dinero…
podemos llevárnoslo… Si Slave le pega una paliza, después
será fácil quemarlo allí…
- Y ya ha pasado mucho tiempo desde que vi a Slave golpear a alguien...
– se rió con suavidad el chico, cerrando los ojos e
imaginando el fuego. – No puedo esperar.
-Quememos la casa entera…- sonrió besándole
el cuello -¿Sabes? Existe un arma… vieja… de
la primera guerra mundial… pensé que te divertiría
más aún que sólo la gasolina… un lanzallamas…-
se rió saliendo de la barandilla con él y subiéndose
los pantalones.
- ¿Un lanzallamas? Eso suena genial – exclamó
el chico entusiasmándose y buscando su ropa interior, a ver
donde la había tirado, y recogiendo el resto de su ropa,
aún sin vestirse, más interesado en la conversación.
-Sabía que te iba a gustar… se me ocurrió mientras
follábamos… - se rió sujetando su sexo y acariciándoselo
aunque ahora sólo era porque le hacía gracia que aún
no se vistiera –Eres un exhibicionista…- se rió,
besándolo –Veré cómo consigo uno…
sin dejar muchas huellas de haberlo hecho…
- Y tú eres perfecto, ¿no? – se rió
besándolo y acercándose a la barandilla de nuevo,
gritando. – Eh!!!! Estoy desnudo! Estoy desnudo y acabamos
de tener sexo encima de ustedes!!!!! – se echó a reír,
descontroladamente, girándose para mirar al albino.
- A mí me gusta que estés desnudo- lo cogió
a horcajadas girando un poco sobre sí mismo y besándolo,
de nuevo apoyando la espalda contra la barandilla –Follaremos
mientras todo arde… -lo miró a los ojos sonriendo con
algo de malicia.
Dragon se rió, encantado. – Y te haré correrte
como nunca te has corrido antes...
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