Capítulo 4- Slave Does College
(Stray Dogs and Abandoned Kittens)
Slave entró como siempre por la puerta trasera de la tienda
entre los callejones de la basura. Abrió las piernas pasando
por encima del supuesto hombre que no se movía de su postura
hacía días –Sigue en la misma postura…
- Yo no querría vivir con un cadáver.... –
protestó el chico, cubriéndose la nariz por si acaso,
y pasando por encima de él igual que el moreno.
-No vivo con él… - pasó por el suelo totalmente
vacío salvo por algunos papeles, sobras de comidas o botellas,
caminando hacia el almacén que era donde tenía su
colchón. Metió la poca ropa que tenía en una
bolsa y miró el saco de arena preguntándose cómo
iba a practicar ahora cuando no pudiera ir al gimnasio –Vivo
aquí… nadie entra en mi zona…
- Lo comprendo... – asintió, mirando el cuerpo del
moreno nuevamente de arriba abajo, sin siquiera preguntarse si era
de mala educación. Caminó hacia el saco de arena,
tocándolo con dos dedos. – Y aquí entrenas.
¿Quieres llevarlo contigo? Aunque sería mejor si tuviéramos
el auto...
-Bueno… de todos modos cargarlo me hará bien…-
descolgó la cuerda que lo sujetaba al techo y se lo colgó
al hombro pasándole la bolsa –El auto… sólo
haría que nos detuvieran… y prefiero morirme que estar
encerrado en una cárcel… o tal vez no… nunca
he estado en una… ¿y tú?
Dragon negó con la cabeza, sujetando su bolsa con ambas
manos, más por jugar que porque le pesara. – Siempre
huyo antes, y creo que tienen cosas más importantes que hace
que perseguirme a mí. Pero no saldría por buen comportamiento...
-No… supongo que yo me pegaría con todos los que me
tocasen los cojones… aunque…sin drogas… y con
sexo limitado a la mierda que haya ahí… no suena bien…
suena deprimente… - lo miró a los ojos cargándose
el saco a la espalda –Creerán que llevo un muerto aquí…
¿cojo al de la puerta?- inclinó la cabeza a un lado
en lo que era una broma, aunque no lo pareciese.
- No, no me gustan esos souvenirs - le sonrió, aunque no
estaba seguro de si bromeaba, o era efecto de la droga o qué.
– Pero no creo que nadie te pusiese una mano encima luego
del primer día. Y he escuchado, que igual consigues lo que
sea allá adentro.
-No me apetece probarlo… igual no consigo lo que quiero ni
aquí… ¿Cómo conseguirlo allí?-
lo miró a los ojos tirando de nuevo de la cuerda del saco
–Vamos… ¿se te ha pasado?
- Un poco, pero tengo más... – le aseguró,
sonriendo igual. - ¿Cómo que no consigues lo que quieres?
¿Qué quieres?
-Hm… - se rió caminando delante de él con el
saco a la espalda, alejándose del ruido de las sirenas de
los coches –Habrá visto mi tatuaje… el tío
en el que me meé… pero no creo que nadie abra la boca
por más que investiguen… ¿crees que lo harán?
Hemos liado una buena…
- No lo sé, pero no me voy a cambiar el look.- se rió,
pensando que él no era para nada sutil, ni se había
preocupado por ser identificado. – Nadie sabe donde vivo,
por lo menos. ¿Dolió? El tatuaje- preguntó,
cambiando de tema de pronto.
-Nadie sabe mi nombre de todos modos y…no, sólo por
algunas zonas… en el cuello y en las cachas ¿Por qué?
Siempre puedes colocarte antes de hacerte uno…- sonrió
levemente pensando que igual él no pensaba cambiar nada tampoco
–Duelen más los piercings…
- Sí, lo imagino, sólo tenía curiosidad. Es
un poco difícil imaginarte adolorido. Claro que apenas te
conocí – sonrió, mirando hacia delante.
-Pues no soy superman…- se rió bajando la cabeza –Algunas
cosas me duelen… - se paró un momento para levantar
de nuevo el saco de arena porque ya hasta sudaba de cargarlo–Debí
llevarme el puto saco vacío y llenarlo otro día…
¿es tu pareja ese tío con el que viniste?
Dragon se echó a reír, imaginándose eso. –
Qué va! Me hubiera matado ya, es mi proveedor.
El moreno se rió –Debe estar bueno…si dices
eso…
- ¿Bueno? Hum.... no está mal, no, pero no es mi
tipo. Y te aseguro que yo no soy el de él. – se rió
de nuevo. – Ya llegamos, cruzamos la calle.
-Vale… o me moriré por el camino… Tengo sed
además, debimos comprar algo, aunque aún estamos a
tiempo después de subir esto… cinco putos pisos…
mierda… lo había olvidado…- sacudió la
cabeza dejando el saco en el suelo un momento y apoyándose
en él
- Tengo botellas de agua arriba. ¿Te crees que vivo del
aire? – lo miró, notando lo cansado que estaba. –
Podemos subirlo hasta el primero o el segundo, nadie se lo va a
llevar.
-Podemos… vaciarlo…- lo abrió volteándolo
y vio caer la montaña de arena en la acera –Vale…
que le den por culo, ya lo llenaré mañana y subiré
bolsas con arena poco a poco… - cogió el saco casi
vacío en la mano y tomó su bolsa de las manos de Dragon
porque ya podía llevarla él mismo –Duermo hasta
la tarde… ¿te importa?
- No, a mí no me importa. ¿Te importa si no duermo
aún? – le preguntó, porque se sentía
algo activo, aún no se le pasaba el efecto del todo.
-No voy a dormir aún…- se rió pensando que
seguramente no se iba a dormir en toda la noche. Por eso, después
no era capaz de despertarse a una hora normal –Además…
es tu casa puedes hacer lo que te dé la gana…
- Ya lo sé, pero estaba siendo cortés. A veces hasta
yo lo soy. – se rió, subiendo tres escalones en la
acera. - ¿Sabes? Si me quisiera suicidar, vendría
aquí el día que lo van a tirar abajo y no haría
nada, sólo esperar.
-Yo no… imagina que se te cae la pared encima y te quedas
en coma… o que te quedas inmóvil… y te salvan…
lo mejor es tirarse desde tan alto que pierdas la conciencia al
descender… entonces cuando llegas al suelo no te enteras y
tampoco hay salvación… - sonrió mirándolo
–Y además, podrías sentir que vuelas por un
rato…
- Sería agradable volar.... – sonrió, estirando
los brazos como si lo hiciera. – No lo sé, me quisiera
ir con estilo, con estruendo, o al menos, causarle un susto a alguien.
-Entonces lo mejor es que saltes a la vía de un tren…-
se rió mirándolo –pero serías un cadáver
asqueroso… igual que si te tiras… prefiero morirme como
estoy… ¿veneno?
- Pero igual puedes quedar con la cara contorsionada y la lengua
fuera. – se rió, sacando la lengua luego como imitando.
– Aunque supongo que es la mejor manera.
-Y espuma por la boca… Bueno… me cortaré las
venas como en las películas… dentro de una bañera
con agua caliente… ¿Sabes que un tío trato de
matarse con una pistola y por dos veces falló y sólo
se quitó trocitos?
- Qué asco! Y ¿ahora? ¿Quedó tarado?
-No, al final consiguió pegarse el tiro….- lo miró
a los ojos y después al edificio que estaba a su lado –Supongo
que es esto… ¿no?
- Bienvenido a mi mansión- el chico se le paró por
delante como presentándoselo, y procediendo a entrar luego,
sin esperarlo. Ni que se fuera a ir huyendo.
Slave lo siguió escaleras arriba pensando que no estaba
nada mal para ser un edificio en demolición -¿Has
entrado en los otros pisos para ver si se podía robar algo?-
preguntó subiendo el primer piso y notando que había
algunos yonkis –Bueno… pero no en estos claro…
- No hay mucho, casi todos se llevaron lo suyo.... – sonrió,
mirando atrás y continuando. – Y como yo no tengo nada....
-Tienes un culazo…- se rió porque lo tenía
delante y así era imposible no fijarse -¿Sólo
tienes una cama?
- Sólo una.... ¿te molesta? No, verdad – se
rió, girándose. – Y si vamos a contar así,
tú eres millonario.
Slave sonrió bajando la cabeza –Subastaré mi
“virginidad” en ebay entonces… y no, no me molesta
¿quieres que duerma contigo?
Dragon se detuvo, mirándolo de soslayo, pensativo. - ¿
No ibas a dormir en el piso, o sí?
Slave se encogió de hombros –Si tú quieres dormiré
en el piso…
- No, duermes conmigo. – murmuró, serio, y saliendo
al pasillo, ya en su piso, dirigiéndose a una puerta.
El moreno lo siguió con la mirada preguntándose si
se había molestado con él por su manera de ser, permaneciendo
en el marco de la puerta sin moverse por unos segundos hasta que
lo siguió.
- Aquí es.... – anunció, pateando una caja
vacía con el pie, y dejándolo pasar dentro, cerrando
la puerta tras de sí. Aún tenía algunos muebles
allí, aunque se notaba que los había traído
de otros pisos, y no eran nada que alguien quisiese conservar. –
Querías agua, ¿no? – sonrió, entrando
en la habitación para regresar con una botella. – No
tengo electricidad así que mucho menos refrigerador. –
se rió de nuevo.
-Es igual… no me gusta el agua fría …- cogió
la botella y bebió abundantemente, dejando su bolsa y el
saco a un lado. Observó el colchón que estaba sobre
unos palieres pensando que aún así se veía
mejor que lo suyo y se acostó encima boca abajo, cansado
de haber cargado con el saco tanto tiempo –Seguro que no tienes
agua corriente…- sonrió girando la cara a un lado para
mirarlo.
- Van a demoler el edificio, no tengo nada.... – se sentó
en el colchón, sacando una vela y encendiéndola, dejándola
en el piso. – Pero al menos tengo un techo, y eso es algo,
por unos días...
-¿Y no te lavas?...- se rió mirándolo aún
y rozándose la nariz contra la almohada antes de mirarlo
de nuevo –Qué horror… cuando vas al báter
no puedes tirar de la cadena…
- Uso el baño público.... si no, me cuelo en algún
sitio que tenga duchas o algo... Claro, que tiene que estar lleno
para que me dejen pasar. – sonrió, quitándose
lo que quedaba de su camiseta, y dejándose caer para atrás.
– Y mejor vas al báter en el apartamento de al lado,
está vacío. A menos que te estés haciendo,
claro.
-No… ya hice antes todo lo que quería… sólo
estaba pensando…- se rió al acordarse de lo que había
hecho y le pasó la mano por el pecho, acercándose
un poco y apoyando la cara en una de sus piernas -¿Irás
mañana a algún lado?
- No por la mañana. Debería ir a trabajar luego supongo...
– suspiró, con ningunas ganas de hacer eso. –
Y ya veremos por la noche, ¿Y tú? ¿Tienes algún
lado al que ir?
-No… quería saber si podía ir contigo…-
se quedó mirando la pared pensando que seguía pareciendo
un sueño sicodélico –Hacía tiempo que
no sabía qué pasaría al día siguiente…
No soporto la sensación de saber qué pasará…
- Entonces, no te diré si puedes venir conmigo o no. –
se rió, pasándole la mano por el cabello. - ¿Por
qué? ¿Por qué prefieres no saber?
-Porque… si sé lo que pasará, seguramente sea
porque me voy a aburrir mortalmente…- cerró los ojos
dejándose acariciar –Si no me dejas ir, puedo seguirte…-
sonrió entreabriendo los ojos -¿Alguna vez piensas
que deberías hacer otra cosa?
- ¿Hacer qué? No hago nada... – se rió
un poco aunque con menos energía, continuando con las caricias.
-A eso me refiero… a hacer algo…- miró hacia
arriba y subió un poco por el colchón a cuatro patas
sobre él, acostándose después a su lado, sujetándole
la mano y poniéndola de nuevo sobre su pelo, rodeándole
el pecho con un brazo.
- Me agradas, claro – se rió, pensando que si no,
no lo llevaba a su casa. – Pero no soy la clase de chico que
hace cosas. Una, son tediosas, dos.... no sé hacer nada realmente.
¿Qué dices tú? ¿Qué harías?
-No sé… poner una bomba… y petar un edificio
entero… - se rió girándose en la cama boca arriba
pensando en si estaría creyendo que se refería a algo
constructivo.
- Oh... ese tipo de cosa – Dragon se echó a reír,
ahora sí de veras. – Creí que querías
ir a la universidad o algo... Pues sí, sí pienso mucho
en esas cosas, ¿que no es obvio?
-No sé… acabo de conocerte… y estabas colocado…
- se rió girándose hacia él de nuevo –A
la universidad… a follar encima de la mesa del profesor…
o al profesor incluso…- se rió de nuevo, imaginándose
a un profesor que no tendría nada que ver con la realidad
seguramente –Les enseño a follar a los heteros…
- Deberías hacer videos porno, eso sería un buen
negocio. “Slave Does College” – se rió,
haciendo gesto como si pudiera leer la cartelera. – Y siempre
estoy colocado, o casi siempre.
-Yo también… y cuando no lo estoy, debería
estarlo… como ahora…- le pasó la mano por el
pecho, arrastrando los dedos con algo de fuerza –No podría
hacer pelis putas… no me gusta tirarme a cualquiera…
me deprime…- lo miró a los ojos –y nadie sabe
darme lo que quiero…
- ¿Te deprime? – lo miró sorprendido. - ¿Te
deprimí yo? No era mi intención. – le sostuvo
la mirada. - ¿Qué es lo que quieres?
-Tú no me deprimiste… pero no eras cualquiera, me
habías interesado… y también fue incluso mejor
de lo que esperaba. Me deprimo cuando… no saben follar conmigo…
o cuando creen que seré de un modo que no soy… y no
les gusta lo que hay… ni siquiera los polvos son tan simples
como sus mentes…- susurró aún mirándolo
a los ojos aunque ya comenzaba a sentir la necesidad de apartar
la mirada.
- Polvos complicados ¿eh? – se rió un poco
aunque con suavidad, algo extraño en él, y aún
sosteniéndole la mirada. – Yo creo que tú eres
complicado. Deben esperar alguien simple, o que tomes el control,
por la manera en la que peleas.
-Supongo… pero mi nombre no es marketing…- sonrió
levemente –Aunque lo haría, tomar el control si supieran
hacer que lo hiciese… - apartó la mirada y lo miró
de nuevo para saber si seguía mirándolo así
–Haría cualquier cosa… puedo hacer cualquier
cosa… pero de todos modos nunca he sentido ni siquiera las
ganas de tomarme la molestia de demostrárselo a ninguno de
ellos…
- Pues no lo hagas. No tienes por qué demostrar nada –
suspiró el chico de cabello rosa, aún mirándolo
por un momento más y luego mirando al techo. – Yo no
le demuestro nada a nadie. Tampoco tengo nada que demostrar.
-Has dicho que querrías suicidarte haciendo una escena…
- se rió mirándolo mejor, ahora que no lo miraba él
–Eso no es de alguien que no trata de demostrar ciertas cosas…
no sé…a ti mismo a lo mejor - se acercó un poco
más apoyando los labios en su hombro y deslizando los dedos
por su pecho y su abdomen apenas tocándolo, jugando con la
suavidad de su piel -Espero que me den otra pelea pronto…
tal vez debería dejar de matarlos…- se rió contra
él y apoyó la mano cerca de su cuello.
- Shhh... no se supone que uses mis palabras en mi contra –
protestó como molesto, aunque no lo estaba. – Es sólo
que me gustaría dejar una huella, porque no es como que la
vaya a dejar de ninguna otra manera. Además, me gustan las
bromas. – lo miró de soslayo, ahora sonriendo y volviendo
a desviar la mirada. Era agradable ser acariciado así. –
Supongo que si los matas a todos, nadie más querrá
pelear contigo.
-Yo lo haría… a lo mejor para vengarme… a lo
mejor por matar a alguien que ha matado a tanta gente… pelearme
no es divertido si no me duele… Una vez casi pierdo…
pero no recuerdo ninguna mejor… mejor que un polvo…
- sonrió cerrando un poco los ojos -¿Tienes familia?
- No, me abandonaron de pequeño, luego me recogió
una loca y luego se murió. – resumió sin mucho
interés. – Y claro, tú lo harías pero
no sería interesante verte pelear contigo mismo. O tal vez
sí... – se giró, para verlo más directamente.
- ¿De veras te gustó tanto casi perder? Oh.... no
me has dicho si tienes familia tú.
-Fue excitante… nos pasamos mucho tiempo en el ring…
estaba agotado…fue… no sé… Cuando le gané,
me hizo sentir que realmente lo había hecho… pero me
partí una costilla… - lo miró a los ojos entreabriéndolos
–Me echaron de casa cuando tenía 18…
- ¿Por qué? – continuó observándolo,
interesado a pesar de la gran historia que había dado él.
- ¿Mataste a ese tío?
- El mejor amigo de mi hermano me había prometido hacerme
un regalo cuando los cumpliese… y mi madre entró…
y me vio sobre él, follándomelo mientras tiraba de
una cadena en mi cuello. Mi madre se quedó horrorizada, mi
padre me gritó que me detuviera, pero el amigo de mi hermano
me ordenó seguir y lo hice… hasta el final… por
eso… Y no, no lo maté…
Dragon se echó a reír, besándolo en los labios
de pronto. – Eso fue genial. Te merecerías otro trofeo.
– se recostó de nuevo, mirando al techo. – Pero
¿sabes? No comprendo a los padres, si se supone que te deben
querer, y luego te echan por cualquier cosa. Al menos los míos
no se molestaron en fingir- se rió de nuevo. - Al menos puedes
pelear con él de nuevo.
-Bueno no, se mató de una sobredosis…- lo miró
y le acarició el cuello riéndose por su forma de reír.
La verdad es que sonaba un tanto sicótico pero le hacía
gracia –Los padres te tienen porque sienten que ha llegado
el momento de tener un hijo… luego no eres lo que habían
imaginado en su mundo prefabricado… y simplemente se deshacen
del estorbo… no les guardo rencor… me da igual, de todos
modos no me sentía querido ¿y tu madre? ¿Te
quería?
- Ya te dije que me abandonaron de pequeño. Y si te refieres
ala mujer que me recogió, no sé, supongo que sí,
pero no sé si estaba muy consciente de nada. Al menos me
daba comida... – contestó, cerrando los ojos, sonriendo.
– Es una pena... me hubiera gustado verte pelear con él.
-Supongo que algún día llegará otro…
supongo que incluso llegará el día en que alguien
acabe conmigo ahí arriba…- lo miró levantándose
con un brazo para verlo mejor, aunque estaba muy oscuro sólo
con la luz de la luna y aquella vela cuya llama oscilaba por momentos,
y le pasó la mano por la cara –Me siento como si fuera
un sueño extraño…
- Lo sé, es extraño. – le sonrió, observándolo.
– Pero es un buen sueño. – le tocó la
plaquita del collar, jugando con ella. – Dime, si dejo la
puerta abierta, ¿te escaparás? ¿O va a venir
tu dueño a buscarte?
-Soy stray…- susurró dejándose caer a su lado
de nuevo y volteándose hacia el techo para abrirse el pantalón
y quitárselo. Se giró de lado de nuevo, mirándolo
–No tengo a donde ir.
- Ahora ya tienes a donde quedarte, por lo menos – le sonrió,
girándose de espaldas a él luego, y mirando la llama
de la vela, soplándola.
El moreno se quedó viendo hacia donde estaba Dragon, aunque
ahora no veía apenas nada y le sujetó el hombro en
la oscuridad acercándose y pegando la nariz a su pelo hundiéndola
entre los mechones rosados, rodeándole el pecho con el brazo
-¿Puedo abrazarte? – susurró.
El chico no respondió, simplemente, estirando su bazo y
tanteando hasta dar con el del moreno, rodeándose a sí
mismo con él, y echándose hacia atrás para
pegarse.
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